En un artículo reciente comentábamos que, a pesar de que la tasa de paro era la más baja desde el 2008, el crecimiento de empleo era el más lento desde el 2014.
Desde el comienzo del 2020 se han destruido 244.044 empleos, lo que supone la mayor caída desde 2013. Además ha habido un aumento del paro en 90.248 personas (su mayor aumento desde 2014).
El Gobierno actual se escuda en “el profundo impacto que ha tenido la finalización de la Campaña de Navidad”; notándose más en sectores como el Comercio y la Hostelería y, por otro lado, en el Sector Agrícola (15.317 trabajadores menos en el balance mensual del sistema especial agrario) a causa de las tormentas caídas durante las campañas, lo que propició este descalabro.
Un análisis más exhaustivo refleja que en todos los sectores se destruyó empleo, principalmente en las áreas de Comercio, Reparación de vehículos, Hostelería, Actividades Administrativas / Servicios Auxiliares y Actividades Sanitarias / Servicios Sociales. Sucede lo mismo si el sesgo lo hacemos por CCAA, aunque el descenso fue más pronunciado en Andalucía, Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana.
Otro dato interesante es que el gasto en prestaciones de desempleo fue un 8.9% superior en el 2019 con respecto al 2018 y es el nivel más alto desde el 2015.